sábado, 6 de diciembre de 2025

"Una sonrisa para cada día". ESO, CFGB y Bachillerato. 2ª SEMANA DE DICIEMBRE.

 


2ª SEMANA DE DICIEMBRE

LUNES: EL OLVIDO DE LA NAVIDAD

¡Buenos días! Una vez los animales tuvieron una reunión. La zorra preguntó qué era para ellos la navidad a lo que el oso respondió:

- ¡Turrón! Para mí la Navidad es una buena cantidad de tabletas de turrón.

Intervino la urraca:

- Yo subrayaría los adornos luminosos y los colgantes deslumbrantes. La Navidad es una cosa brillante.

También el buey quiso dar su opinión:

- ¡Lo que hace la Navidad es el cava! Sería capaz de beber un par de botellas tranquilamente.

El burro tomó la palabra con vehemencia:

- Pero, buey, ¿te has vuelto loco? La cosa más importante de la navidad es el Niño Jesús. ¿Lo habías

olvidado? Lleno de vergüenza, el buey bajo su enorme cabeza y dijo:

- ¿Pero lo saben los hombres?

Reflexión: Corremos peligro de que nos pase como a los animales. Fiestas, turrones, luces, cavas y luego que han terminado nos han dejado un profundo vacío. Eso no era la Navidad. En medio de la fiesta tiene que estar presidiéndola Jesús. Él es el protagonista verdadero.

 

MARTES: QUIERO ESTAR EN VELA SEÑOR (2ª PARTE)

¡Buenos días! QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR

Porque el mundo necesita ánimo y levantar su cabeza

Porque el mundo, sin Ti, está cada vez más frío

Porque el mundo, sin Ti, es un caos sin esperanza

Porque el mundo, sin Ti, vive y camina desorientado

QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR

Prepara mi vida personal: que sea la tierra donde crezcas

Trabaja mi corazón: que sea la cuna donde nazcas

Ilumina mis caminos: para que pueda ir por ellos y encontrarte

Dame fuerza: para que pueda ofrecer al mundo lo que tu me das

Quiero estar, en vela, Señor

Entre otras cosas porque, tu Nacimiento,

será la mejor noticia de la Noche Santa

que se hará madrugada de amor inmenso en Belén.

¡VEN, SEÑOR!

MIÉRCOLES: BUSCANDO AMIGOS

¡Buenos días!

El amigo dudoso nunca te ha visto llorar; el amigo seguro tiene los hombros empapados de tus lágrimas.

El amigo dudoso no sabe cómo se llaman tus padres; el amigo seguro tiene sus datos anotados en su libreta de direcciones.

El amigo dudoso detesta que lo llames muy tarde en la noche; el amigo seguro te pregunta por qué tardaste tanto en llamar.

El amigo dudoso te busca para contarte sus problemas; el amigo seguro te busca para ayudarte con los tuyos.

El amigo dudoso, cuando te visita, se porta como un invitado; el amigo seguro, en tu hogar, se siente en casa.

El amigo dudoso piensa que la amistad se ha acabado cuando los dos se pelean; el amigo seguro sabe que no hay amistad que valga que no resista una buena pelea.

El amigo dudoso espera que lo acompañes en las buenas y en las malas; el amigo seguro te acompañará a ti, pase lo que pase.

¿Y tú, qué tipo de amigo eres?

JUEVES: “LOS OJALATEROS”

¡Buenos días!

Con frecuencia nos lamentamos de que las cosas no sucedan como nosotros queremos y estamos

continuamente incordiando a los demás porque las cosas no salen a nuestro gusto.

“Dicen que cuando Carlos VII El Victorioso (1422-1461) quería conquistar unas tierras heredadas de sus antepasados, le rodeaban gente que siempre estaban con estas palabras en sus labios:

-¡Ojalá que venzan nuestras tropas!

-¡Ojalá que desaparezcan nuestros enemigos!

-¡Ojalá pronto triunfemos en Madrid!

-¡Ojalá...!

Así decían, pero ellos no hacían nada porque aquello sucediera. Sólo sembraban discordias y condenar a los vecinos, pasar el tiempo en frivolidades...

Por eso les llamaron los “ojalateros”.

Estamos acercándonos a la Navidad y esta expresión solemos decirla con frecuencia. ¡Ojalá que Dios nos traiga suerte, trabajo, alegría...! Pero nosotros no hacemos nada para que eso pueda suceder. Jesús vendrá de nuevo, pero tenemos que preparar el terreno.

VIERNES: LA LUZ DE LA ESPERANZA

¡Buenos días!

Había una vez, hace cientos de años, en una ciudad de Oriente, un hombre que una noche caminaba por las oscuras calles llevando una lámpara de aceite encendida.

La ciudad era muy oscura en las noches sin luna como aquella. En determinado momento, se encuentra con un amigo. El amigo lo mira y de pronto lo reconoce.

Se da cuenta de que es Guno, el ciego del pueblo. Entonces, le dice:

- ¿Qué haces Guno, tu ciego, con una lámpara en la mano? Si tú no ves.

Entonces, el ciego le responde:

- Yo no llevo la lámpara para ver mi camino. Yo conozco la oscuridad de las calles de memoria. Llevo la luz para que otros encuentren su camino cuando me vean a mi... No solo es importante la luz que me sirve a mí, sino también la que yo uso para que otros puedan servirse de ella.

Cada uno de nosotros puede alumbrar el camino para uno y para que sea visto por otros, aunque uno

aparentemente no lo necesite. Alumbrar el camino de los otros no es tarea fácil...Muchas veces en vez de alumbrar oscurecemos mucho más el camino de los demás.

Si toda la gente encendiera una luz, el mundo entero estaría iluminado y brillaría día a día con mayor

intensidad. Tenemos en el alma el motor que enciende cualquier lámpara, la energía que permite iluminar en vez de oscurecer...

Está en nosotros saber usarla...Está en nosotros ser Luz y no permitir que los demás vivan en las tinieblas...

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario