II SEMANA
Lunes: LA TÚNICA RASGADA
Tema: PERDÓN‐MISERICORDIA
¡Buenos días! Un
guerrero con un pasado bastante turbio, preguntó a un ermitaño si creía que
Dios recibiría su arrepentimiento. Y éste después de darle muchos consejos, le
preguntó:
«Dime, te lo
suplico, si tu túnica está rasgada, ¿la tiras?»
«No, respondió
el otro, la coso y vuelvo a ponérmela.»
«Por lo tanto,
añadió el monje, si tú cuidas tu vestido de paño, ¿quieres que Dios no tenga
misericordia de su imagen?»
(Del libro “Los
padres del desierto”)
Reflexión: Somos imagen de Dios, somos hijos de Dios. ¿Podrá el Dios‐Amor abandonarnos alguna vez? ¡Que necios somos cuando creemos que lo que hemos hecho mal es tan grave tan grave que Dios no lo puede perdonar! Gracias, Señor, por las veces que hemos comprobado que alguien nos ha perdonado, porque eso nos ha dado mucha alegría. Ayúdanos a saber perdonar siempre, igual que tú haces con nosotros. Te pedimos por los violentos, asesinos, ladrones, estafadores... Son hijos tuyos y lo que tú quieres es que se arrepientan.
Martes: MANOS
Tema: AUTOESTIMA
¡Buenos días! Un
hombre hablaba consigo mismo, al tiempo que iba caminando, como tienen
costumbre de hacer aquellos que en la vida no tienen amigos con quienes
confiarse. El diálogo que mantenía consigo mismo decía:—Nadie es más pobre que
yo; tenía un sombrero y me lo llevó el viento; tenía un manto y me lo han
robado; tenía un bastón y he tenido que quemarlo para hacer fuego; tenía un
tazón para el alimento y la bebida, y el río me lo ha llevado; no tengo más que
las manos para recoger agua y poder beber. ¿Hay en el mundo alguien más pobre
que yo?
—Yo, hermano. El
hombre se gira y ve delante de si al Señor, vestido de peregrino.
—Yo soy más pobre que tú. Tú, si tienes sed, puedes recoger agua con las manos: yo no, porque me las agujerearon con los clavos. (Taulero)
Reflexión: Señor, perdónanos, porque nos acordamos muy poco de ti. Perdónanos, porque olvidamos lo que has padecido por cada uno de nosotros. Nos acordamos de la ayuda que nos prestó tal amigo o amiga sacándonos de un apuro y sentimos cariño hacia él. Si nos acordáramos más de ti, te querríamos mucho más. Gracias, Señor, por tanto como nos amas.
Miércoles: LA MANCHA DE TINTA
Tema: OPTIMISMO
¡Buenos días! Una
vez un maestro estaba dando clase a sus alumnos. Aquella mañana quería
ofrecerles una lección distinta a las que vienen en los libros. Después de
pensar un poco ideó la siguiente enseñanza: Hizo una mancha de tinta china en
un folio blanco de papel. Reclamó la atención de los alumnos y alumnas y les
preguntó:
—¿Qué veis?
—Una mancha
negra— respondieron a coro.
—Os habéis
fijado todos y todas en la mancha negra que es pequeña —replicó el maestro— y
nadie ha visto el gran folio blanco que es mucho mayor.
Reflexión: También
a nosotros nos pasa, Señor, como a los discípulos de la parábola: vemos lo
negativo, que siempre es más pequeño, mucho más pequeño, que lo positivo y no
vemos lo bueno que hay en nuestros padres, profesores, compañeros, amigos...
Somos como el
telediario: lo oyes y te parece que en el mundo no ocurren más que desgracias.
Señor, que valoremos lo positivo y no remarquemos lo negativo en casa, en la
clase, en el colegio...
Jueves: EL AMIGO DEL OSO
Tema: AYUDA
¡Buenos días! Un hombre bueno, viendo que una serpiente venenosa atacaba a un oso, fue a socorrerlo y lo libró de la serpiente. El oso fue tan sensible a la bondad que habla demostrado el hombre con él, que le siguió por donde quiera que fue y se hizo su esclavo fiel, protegiéndole de cualquier cosa que le molestara y haciéndole muchos favores. Un día, el hombre estaba durmiendo y el oso, de acuerdo con su costumbre, estaba sentado a su lado, espantando las moscas, sobre todo aquellas que intentaban posarse en la cara de su amo y salvador. Las moscas se volvieron tan persistentes en sus molestias que el oso perdió la paciencia y, agarrando la piedra más grande que pudo encontrar, se la arrojó con la intención de matarlas, pero, desafortunadamente, las moscas escaparon y la piedra cayó sobre la cabeza del durmiente, aplastándola. La moraleja es: «Hay que saber ayudar a los demás con inteligencia». (Proverbio árabe)
Reflexión: Señor: este proverbio árabe nos recuerda que no basta sólo con la buena voluntad para ayudar. Necesitamos una buena preparación. Ayúdanos a comprender que los estudios de hoy, que muchas veces se nos hacen tan aburridos y difíciles son una preparación para poder ayudar a los demás el día de mañana con inteligencia. Te pedimos esta mañana por nuestros profesores y padres.
Viernes: INAUGURACIÓN DE LAS ESCUELAS DEL AVE MARÍA
¡Buenos días! La inauguración de las Escuelas del Ave María en Granada el 12 de octubre de 1889 fue un acontecimiento de gran relevancia, no solo para la ciudad, sino para la educación en España. Estas escuelas fueron fundadas por el sacerdote y pedagogo Andrés Manjón, cuyo enfoque revolucionario en la enseñanza puso las bases para un nuevo sistema educativo basado en principios religiosos, morales y sociales, pero también profundamente práctico y adaptado a las necesidades de los niños de la época.
El 12 de octubre de 1889, en el Día de la Hispanidad, fue
seleccionado de manera simbólica, no solo por ser una fecha significativa en el
calendario religioso y nacional, sino porque reflejaba el ideal de Manjón de
una educación al servicio de la sociedad y profundamente enraizada en los
valores cristianos. Entre los participantes en la inauguración se encontraba,
evidentemente, el propio Andrés Manjón, quien era el principal artífice del
proyecto. También asistieron autoridades eclesiásticas, figuras políticas
locales, y personalidades del ámbito de la educación y la cultura de Granada.
Dada la relevancia del proyecto, el acto atrajo a un buen número de granadinos
interesados en el proyecto educativo.
Durante la
inauguración, se realizaron actos litúrgicos, como una misa solemne, y se
bendijeron las instalaciones. Además, hubo discursos tanto por parte de Manjón
como de otras autoridades que apoyaban su iniciativa. Se destacó el compromiso
de la Iglesia y de las instituciones locales con el desarrollo de la educación
entre los sectores más pobres de la población.
Uno de los
elementos más llamativos de las Escuelas del Ave María era su disposición al
aire libre. En lugar de los típicos edificios cerrados, la escuela estaba
estructurada para que los niños pudieran aprender en contacto directo con la
naturaleza, utilizando como recurso educativo el propio entorno del Sacromonte.
El método de enseñanza se centraba en la repetición, la observación y la
experiencia práctica, algo que rompía radicalmente con las prácticas educativas
tradicionales de la época. ¡Felicidades por pertenecer a esta importante obra
educativa y a seguir cumpliendo años cumpliendo el sueño de D. Andrés Manjón!
No hay comentarios:
Publicar un comentario